El proceso de granallado consiste en la limpieza y preparación de las piezas metálicas para la pintura.
Para el proceso se utiliza como abrasivo la granalla de acero de forma angular, que se hace recircular gran número de veces, ya que sus partículas son poco quebradizas y se va añadiendo granalla nueva a la instalación para mantener una mezcla operativa óptima para el proceso de granallado.
El medio de proyección empleado es un chorro de aire a presión producido por un compresor y la modalidad de chorreado que se emplea es el chorro seco en cabina, modalidad que permite establecer un microclima de condiciones controladas e idóneas para la realización del trabajo.
Financiado por la Unión Europea - NextGenerationEU